lunes, 12 de noviembre de 2007

De el viaje en micro


Me subo al camión y espero sentado a que el chofer pase a cobrarme, durante ese tiempo me rio un poco de los nombres que tiene para la estación de metro zapata:

- Uno a zapata, dijo un señor- A zapatilla uno, va. Gracias
- A zapata- A zapatita, sale pues, Gracias
- En zapata, dije- Zapaton, orale pues. Gracias

Las tres veces que se escucho gracias en el camión fueron las que dijo el chofer, las tres veces muy amable, las tres veces con un suave tono de voz, las tres veces muy amigable, pero en la cuarta cambio todo la historia, porque la cuarta fue para el buen Corona (un señor que se encarga de anotar en su libreta la hora de salida y llegada de cada camión y por lo cual le pagan 5 pesos por chofer). Bien nuestro amigo chofer se disponía a irse sin darle su pago a Corona (accidentalmente verdad) y es entonces cuando este personaje le hace una seña, tan peculiar y tan graciosa que no se ni como describirla, pero indicada "Hey, a donde crees q vas? y mi varo?" a lo que de muy mala gana (nada comparado con cuando paso de lugar en lugar) el chofer le dio sus 5 pesos y Corona dijo:

-Gracias, que le vaya bien, suerte... a todos
-Gracias, respondió el chofer, esperando que después de escuchar ese "gracias" Corona muriera al instante

Ya con el camión en marcha veo correr a un señor, bien vestido, peinado y aseado, todo el un caballero que desesperado corre tras el camión, yo no soy de los que gritan suben ni nada por el estilo en estos casos (ni en ninguno) asi que solo me divertía, porque mientras mas corria mas iba perdiendo ese aspecto elegante, se quito la bufanda, el saco, se despeino, el sudor escurría por su rostro, los zapatos ya estaban sucios, hasta que al fin alguien mas lo vio y le dijo al chofer,

- Esperese que suben, ahi viene un señor, ire (si asi dijo)

El camión se detuvo, el señor ya muy descompuesto lo abordo, pago y se acomodo en un lugar. Apuesto a que sentía que sus pulmones le iban a explotar, sus piernas le quemaban por dentro. Se agarro muy fuerte de brazo izquierdo, gimió un poco y durmió, lo que no todos supieron es que ya no volvio a despertar.... sufrió un infarto.


"La muerte es una vida vivida. La vida es una muerte que viene." Jorge Luis Borges

6 comentarios:

MMBT dijo...

aaaaay, esa si no la vi venir.
Ansiaba el ya tan esperado final, "y el hombre que subió llevaba en la mano una zapatilla de cristal que hizo calzar a todos los pasajeros hasta que encontro a una mujer de generosas caderas...." y ya sabes lo demas.

(aca entre nos, si paso?)

MMBT dijo...

ese hombre que escribe en el blog no conoce los límites, no sabe distinguir entre voluntad y gracia. Jaja, eres bueno en el arte de escribir, y dice carlos que tambien en el de amar.

Hannah dijo...

Asi exactamente me paso a mi pero en una situacion un poco mas jocosa...

me quite.. bueno me quito la chamarra, me despojo del pantalon, rompio mi blusa, desabrocho mi
sosten, bajo lentamente aquello q cubria mis caderas, beso mis muslos y cuando lo imaginable iba a suceder....

Mordi mis labios arañe su espalda y aquello, esa pequeña muerte jamas sucedio...

Era su primera vez...









Si!! su primera vez con una doncella de 20 el tenia 50!!!


pastillita azuuuuuuuuuuuuul!!

slumDOG dijo...

memo q es verdad en esta vida? Podras tu lidiar con la verdad? si kieres q sea verdad asi sera. Y vaya q hay q tener vigor para seguirle el paso a Diana!!!

Anónimo dijo...

ahora veo que tu aplicas lo que escribes en este breve poema podemos ver que has sido influenciado por los actos mas sutiles de Calors; el burlarse de una manera amplia de la desgracia del prójimo... bastante dulce y generoso

Unknown dijo...

Ja!!! Que cruel descripcion, pero sabes lo que mas me gusta, digo aparte de tu redaccion, son las fotos que ilustran muy bien un cotidiano momento, en esta ciudad tan guapachosa y llena de historias. Y bueno que mal por el tan arreglado señor, pero que se le puede hacer, como lo e comentado antes, uno nunca se ocupa de la salud, ni se prepara para morir, la consecuencia, una muerte puntual y severa.